Funciones de un tramitador de siniestros
Brokalia, es la correduría de los administradores de fincas, entre otras cosas, por la ayuda que éstos obtienen de Brokalia en las gestiones de siniestros de los seguros de comunidades. Por ello, hoy vamos a dedicar el post a explicar cuáles son las funciones de los tramitadores de siniestros en las compañías aseguradoras.
¿Cuáles son las funciones de los tramitadores de siniestros?
Un tramitador de siniestros es un profesional que se encarga de gestionar y tramitar los expedientes de siniestros que han sido declarados por los asegurados de la aseguradora. Sus principales funciones son:
Recepción de siniestros:
El tramitador es el encargado de recibir y gestionar los siniestros que se declaran por parte de los clientes de la compañía.
Análisis de la cobertura del seguro:
El tramitador debe revisar las condiciones de la póliza (condiciones particulares y generales) para verificar si la póliza cubre el siniestro declarado por el cliente.
Comunicación con el cliente:
El tramitador debe mantener una comunicación fluida y eficiente con el asegurado para informarle sobre el estado del siniestro y la evolución del proceso de indemnización.
Gestión de pagos:
El tramitador es el encargado de gestionar los pagos correspondientes a las indemnizaciones que se deben abonar a los clientes afectados por los siniestros.
En definitiva, el tramitador es una figura clave en las compañías de seguros, ya que su trabajo se centra en gestionar los siniestros de los asegurados de la compañía y asegurar que los procedimientos sean eficientes y justos.
Diferencia entre un perito y un tramitador de siniestros
Es habitual que haya cierta confusión en los asegurados entre las figuras que representan los peritos y los tramitadores.
Funciones de los peritos:
Un perito de seguros es un profesional especializado en evaluar los daños causados por un
siniestro para determinar la cuantía de la indemnización que corresponde al cliente afectado. Por lo general, el perito de seguros es un experto en la materia y tiene una formación técnica específica en el ámbito de los seguros y la valoración de daños. Sus principales funciones son evaluación de los daños, determinación de la causa del mismo, informe pericial, asesoramiento técnico, medición de riesgos, etc. Si deseas más información al respecto, te recomendamos leer el siguiente artículo.
En resumen, aunque ambos profesionales trabajan en el ámbito de los seguros y los siniestros, el perito de seguros se centra en la evaluación técnica de los daños y en la determinación de la indemnización correspondiente, mientras que el tramitador de siniestros se encarga de gestionar todo el proceso de tramitación y seguimiento del siniestro en cuestión.