Un edificio ha de contar con su propia póliza que cubra las incidencias y daños que se den en las zonas comunes y que afecten a estas o a las viviendas que lo componen. A la hora de elegirlo existen diferentes presupuestos para seguro de comunidad que requieren de ciertas acciones.

Cómo aprobar el seguro de la comunidad

Según el artículo 14 de la Ley de Propiedad Horizontal, es responsabilidad de los propietarios aprobar la póliza de seguros de la que dispondrá el edificio. Para que este proceso se lleve a cabo, hay que seguir una serie de pasos:

• Solicitud de presupuestos: Será el presidente o el administrador de la finca el que pida varios presupuestos y también el que conozca las diferentes cláusulas de cada uno de los seguros.
• Presentación de presupuestos: Será necesario dar a conocer todos estos presupuestos y exponer a los propietarios los diferentes motivos por los que elegir cada seguro.
• Aprobación del seguro: Será decisión de los propietarios aprobar el presupuesto elegido una vez se hayan expuesto las distintas razones. Tras ser seleccionado, se procederá a su contratación.

Pero ¿pueden votar todos los propietarios?

La respuesta es sencilla, no. Aquellos que no estén al corriente de pago no tendrán derecho a voto a la hora de seleccionar el seguro ni tampoco en cualquier otro tipo de trámite.

Para aprobar la contratación del seguro solo será necesaria una mayoría simple. Sin lugar a dudas, esto facilita la labor de los encargados de llevar las diferentes propuestas.

Las claves para elegir el seguro de la comunidad

Es muy importante escoger el presupuesto más adecuado en cada caso. El precio es un factor relevante, pero no ha de ser el único a la hora de afrontar esta elección.

• El capital de la responsabilidad civil o del continente ha de vigilarse para evitar un infraseguro. Estas cantidades influyen de manera clara en la prima a pagar, pero son muy relevantes para asegurar su solvencia.
• La comunidad ha de estar definida de manera correcta. En este sentido, resulta esencial que no se pase ningún detalle por alto que pueda derivar en una negativa por parte del seguro.
• Vigilar las coberturas que vienen definidas en el seguro de manera clara. Esto implica seleccionar aquellas que se adapten a las necesidades particulares de la edificación.
• Obtener referencias de las diferentes aseguradoras en liza permite tener opiniones contrastadas sobre su funcionamiento.

Los seguros para las comunidades son imprescindibles para los propietarios. Es fundamental contar con una amplia cobertura y aprobar su contratación con el objetivo de que todo resulte legal.

En conclusión, presentar varios presupuestos de seguro de comunidad es básico para que, de este modo, se pueda elegir el que más conviene al edificio.